Para los pacientes de Nueva Jersey, un acontecimiento "nunca" es un resultado médico que nunca debería producirse en un hospital. Se trata de errores graves cometidos por el equipo asistencial o de una falta grave de concienciación. Medicare y Medicaid también los denominan "afecciones adquiridas en el hospital" porque son resultados que les ocurren a los pacientes en los hospitales.
Sin eventos
Los Centros de Medicare y Medicaid se centraron en resultados médicos específicos con el término "nunca evento" para subrayar que no deben producirse si un hospital funciona correctamente. Un hospital en el que esto ocurra se enfrentará a sanciones, incluidas las económicas, y los pacientes no tendrán que pagar el coste de solucionarlos. Entre los ejemplos de "sucesos nunca ocurridos" figuran un equipo quirúrgico que opera un miembro equivocado, infecciones en una vía intravenosa, una caída grave y una transfusión de sangre en la que se utilizó el tipo de sangre equivocado.
Estos sucesos pueden suponer un grave riesgo para la salud y la seguridad del paciente, y además constituyen un error cometido por más de un miembro del equipo asistencial. Por eso se toman tan en serio: varias personas han tenido que cometer errores importantes para que se produzcan, y el resultado puede ser un grave riesgo. Estos sucesos suelen ser un ejemplo de negligencia médica debido al nivel de negligencia o desatención que implican. Su escrutinio por parte de Medicare y Medicaid los pone en el punto de mira e ilustra por qué nunca deberían darse en un hospital con el personal adecuado.
Un "never event" demuestra que la negligencia del equipo asistencial puso en peligro la vida o la salud de un paciente en un hospital cuando no tenía por qué producirse.